Es un superalimento con un alto contenido de proteínas, fibra y grasa.
Su contenido en proteínas de rápida digestión, proporciona también los 9 aminoácidos esenciales, mientras que su alto contenido en fibra soluble, acelera y prolonga la saciedad, reduciendo los antojos entre comidas y mejorando el tracto digestivo, por lo que estimula la tasa metabólica a lo largo del día. Evidentemente, su bajo índice glucémico le hace un alimento ideal para los diabéticos, pues permite mantener un control más aceptable de los niveles de azúcar.
Contiene 8 veces más Omega 3 que el salmón, las que favorecen al sistema cardiovascular y circulatorio, al mantener a raya los límites de colesterol en la sangre.
Gracias a los antioxidantes, se mejora el sistema inmunológico, tras eliminar las toxinas que el cuerpo absorbe diariamente. Además, cuenta con hierro, calcio, magnesio, potasio, vitamina B1, B2, B3, entre otros.